sábado, 20 de marzo de 2010

Reloj, no marques las horas...

"Los Trabajos darán comienzo a las 19:00 h profanas. Se recuerda extremadamente a todos el fraternal deber de la puntualidad. Así como que los Trabajos se abrirán en el mismo instante en que haya el número reglamentario de hermanos para hacerlo, tal y como se acordó en la pasada Tenida".

-Cachis, cachis... Ya voy tarde, siempre igual. Las siete y diez... A ver, a ver... míralo, nada... La puerta ¡cerrada! Ahora me toca esperar aquí... (pegas la oreja a la puerta). Un momento, un momento... No se oye nada, no hay luces... Lo que pasa es que... ¡NO HAY NADIE TODAVÍA!

(Un grupo de hermanos doblan una conocida esquina y vienen bajando la calle en tu dirección).

-Pero bueno, ¿de donde venís? ¿qué pasa?- inquieres.

-Pues del bar del Cojo, de dónde vamos a venir-te responde uno.

-Tranqui, tío, que vamos bien-añade otro.

-¿Y las llaves? ¿Las tenéis vosotros?-preguntas- Es por dejar los trastos.

-No, las tiene Antonio. Está en el bar.

-Entonces, vosotros ¿adónde vais?

-Al bar del Manco. Aquí al lado. Qué vamos a hacer.

(Te vas al bar del cojo. Allí hay unos seis o siete hermanos. Te tomas una copa. Se van cuatro hacia la Logia y te vas con ellos. Te encuentras con Antonio, el que tiene las llaves, y otros tres en la puerta).

-Antonio, ¿dónde coj... estabas?

-Acabo de llegar-Antonio tiene las llaves, por cierto, porque vive al lado del local.

-Bueno, anda, danos las llaves.

(Una hora más tarde)

-Bueno, ¿empezamos ya, o qué?

-¿Por qué no esperamos a Felipe, que acaba de llamar y viene por la carretera del aeropuerto?-se escucha una voz desde el fondo.

(Media hora más tarde)

Ya empezamos. Te sientas al lado del Venerable, que murmura entre dientes: "Pues yo, que me tengo que ir a las diez sin falta..."

martes, 9 de marzo de 2010

Dijo al marcharse... pero debería haber dicho...

"Os dejo con gratitud, pero un poco decepcionado. Esto no es lo que yo pensaba. Nos perdemos demasiado en asuntos administrativos y de Ritual. El debate, nos falta debate".
(A ver, soy el único de la Logia que tiene un Doctorado. ¿Sabéis lo que es eso? Un doc-to-ra-do. Y además en Sociología Aplicada. ¿Y pretendéis que le dé la razón a un electricista al hablar sobre inmigración?).

"La Orden, hoy en día sólo tiene sentido hacia el exterior. Sinceramente, me sentó mal que os negaráis a sacar la nota de prensa sobre la moción de censura del alcalde. Creo que éste no es mi sitio. Para defender nuestros ideales es mejor militar en otro tipo de organización".
(En fin, qué queréis que os diga. Me apunté a esto porque miré toda la lista de políticos que figuraban a lo largo de la Historia. Creí que, dándome pisto, iba a medrar un poco más en el partido, pero, ni flores. A ver si me admiten en UPyD).

"Hemos perdido la esencia primigenia. Los Maestros fundadores la mantuvieron, pero hoy ya no está entre nosotros. Vestigios, quedan sólo vestigios de una Tradición que ignoráis. Venid, y acompañadme en mi camino".
(Últimamente la telepatía no ha funcionado tan bien como al principio. El ovni que vimos en el solsticio quiso decirnos algo y no lo habéis escuchado. No sois merecedores de custodiar el Santo Grial. A lo mejor, ni lo tenéis).

"Debo dejaros con gran pesar. No estoy en el mejor momento de mi existencia, y no quiero ser una pesada carga para vosotros. No olvidaré nunca vuestras muestras de fraternidad. A lo mejor, en un futuro, puedo volver con mis hermanos".
(Ya me he dado cuenta de que me habéis calado y, en fin, no ha quedado nadie a quien lo le haya pedido prestado. Para vuestro consuelo lo mismo me pasó en la comunidad de vecinos de mi bloque, y en la Asociación Libre de Macramé. Si queréis os devuelvo el portátil; al fin y al cabo es un Pentium IV con Windows 2000...).

viernes, 5 de marzo de 2010

LAS CUENTAS DEL GRAN CAPITÁN

Presupuestos Generales Curso masónico 2010/2011 (era vulgar)

INGRESOS:

Cuotas:
23 miembros x 35 euros x 12 meses = 9660 euros

6 Iniciaciones (tirando por lo bajo):
6 profanos x 120 euros = 720 euros

Venta de los pines que hace Luis en el trastero:
100 pines x 5 euros= 500 euros - 100 euros (Luis nos cobra un euro por pin)= 400 euros

Venta de los libros de Historia de la Masonería en Villanueva del Corcho que hemos hecho en el Bubook:
100 libros x 25 euros = 2500 euros- 1600 euros (bubok cobra 16 euros de cada ejemplar)= 900 euros

Total Ingresos: 11680 euros

GASTOS:

Alquiler:
12 mensualidades a 350 euros: 4200 euros

Luz y agua:
Unos 900 euros.

Capitaciones a la Obediencia:
23 miembros x 12 euros x 12 meses = 3312 euros

Velas y productos de limpieza:
75 euros

Cuota dominio de internet:
85 euros

Total Gastos:7672 euros

INGRESOS-GASTOS:
11000-8000 (siendo pesimistas) = 3000 euros de superávit. (VIVA!)

...

(SEIS MESES MÁS TARDE)

—Oye, Antonio ¿tú no te habías ligado a la hija del casero? ¿Le podrías decir una cosita?

jueves, 4 de marzo de 2010

Al partir, un beso y una flor... más o menos.

Bueno, ya está. Ya ganaron los malos malotes y se han cargado la Logia. Lex Luthor es el director general de Endesa, el Doctor Infierno es el Ministro de Sanidad y Falconetti el Presidente del Gobierno. La nostalgia te invade amargamente al recordar los buenos ratos, que ya no volverán, y el trabajo que echaste haciendo mil papeles y pintando en su día el Gabinete de Reflexión con Titanlux, lo que estuvo a punto de costarte la vida por inhalación de disolventes en un espacio cerrado.
Cómo se llega a esta situación merecerá en próximas fechas un post exclusivo, y especialmente complejo que se llamará, por ejemplo, "Idus de marzo".
Pero bueno, ya has mandado una carta, bien breve, bien extensa y sentimental, despidiéndote y pidiendo tu baja (la experiencia me dice que quien manda un escrito reivindicativo y feroz no tiene nunca intención de marcharse).
Ahora viene la parte surrealista.
La conversación suele ser con el muñidor de la conspiración, normalmente por teléfono o, a lo mejor, por e-mail o chat:
Tú: —Oye ¿te ha llegado eso?
Él: —¿El qué?
Tú: —Pues mi solicitud de baja, para que me tramitéis la Plancha de Quite.
Él: —Ah, eso. Eso ahora no se puede cursar, porque estás inmerso en un proceso de Irradiación.
Tú:—¿Yooo? ¿Y por qué?
Él:—Mira, de momento no estás a plomo.
Tú:—¿Cómo no voy a estar a plomo, si tengo pagadas las cuotas hasta 2015?
Él:—No has pagado ni un euro de la derrama. No estás a plomo.
Tú:—¿La derrama? ¿Qué derrama?
Él:—La derrama de la pintura. Tres mil euros que nos cobran por pintar y tú no has pagado nada.
Tú:—¿Y cuándo se ha aprobado eso?
Él:—Ayer por la noche.
(Tomas aliento. Cuentas hasta diez).
Tú:—Bueeeno. Restadme la derrama de las cuotas que he adelantado y ya está.
Él:—Eso sería confundir la contabilidad. Vas en contra de los intereses del Taller.
(Piensas que "de perdidos al río").
Tú:—En fin. Que el Tesorero me pase la derrama que sea, y yo la pago.
Él:—Eso no es todo. Las cuentas del Congreso Masónico de Coplas Baturras que organizamos no están claras. Y tú eras entonces el Tesorero.
Tú:—¡Pero si puse quinientos euros de mi bolsillo y alojé en mi casa a diez personas! Además me debes todavía la Cena de Clausura que te pagué porque "no llevabas suelto".
Él:—Sabía que, tarde o temprano ibas a sacar eso. Así es como entiendes la fraternidad. Ahora tengo más argumentos para irradiarte.
Tú:—Y ¿cuáles van a ser los cargos?
Él:—Intentar fundar otra obediencia en España.
Tú:—¿¡Qué?!
Él:—Te hemos cazado. La otra noche estabas cenando con los del GOM. A ver qué estábais tramando.
Tú:—¿El GOM? ¿Qué es eso?
Él:—No te hagas el tonto: el Gran Oriente Maragato. Te estás buscando una silla.
Tú:—Pero ¡si esa Obediencia es sólo para los nacidos en Astorga! Y yo soy de Lugo.
Él:—Ya, no te creas que somos unos lilas.
Tú:—Bueno, por lo menos mandadme el diploma de Maestro, que me lo dejé en la Secretaría.
Él:—Eso de que tú eres Maestro habría que verlo.
Tú:—Sí, después de quince años... no te fastidia.
Él:—No consta que pagaras los derechos del diploma, y me han dicho que el día de tu subida había sólo dos españoles, de nuestra Obediencia, y el resto eran nueve belgas y un portugués que estaban en el camping de al lado.
Tú:—Vete a freir espárragos.
(tut, tut, tut, tut...).
Pasan los años y, un buen día, decides reintegrarte en otra Obediencia. Un proyecto ilusionante. Pronto llega a oídos de tus antiguos hermanos. Entonces te llaman un día:
Él:—Hola, qué tal. Cuánto tiempo. ¿Todo bien? Oye, mira, que haciendo limpieza en la secretaría, mira por dónde, ha salido tu Plancha de Quite y tu Diploma de Maestro. ¿Has cambiado de dirección? Es para mandártelos por correo...

miércoles, 3 de marzo de 2010

"Querido Hermano extranjero..."

Al principio de la democracia, a las películas eróticas extranjeras se les presumía una calidad de la que carecía la producción picante nacional. La industria dedicada a la filmación de ese tipo de cine nació en España a principios del siglo XX (como certifica el hecho de que el Palacio Real en ese tiempo albergara dos colecciones de indudable interés histórico: una de instrumentos de cuerda Stradivarius y otra de pelis porno). Sin embargo la dictadura arrasó con las nalgas españolas en la pantalla y dejó su contemplación al ámbito de la alcoba, el lupanar y la casa del practicante. El cine verde bueno, bueno, tras la muerte de Franco, debía ser danés o francés, como los quesos, y las pelambreras y celulitis de nuestros chicos y chicas tardaron en valorarse como debían.
Treinta años, sin embargo, han servido para que el país sea puntero en ese ámbito, y las "guarreridas españolas" son tan apreciadas en el mundo como las de Wisconsin o Belgrado, si no más. No en vano, multinacionales como Private tienen la sede en nuestro país.
Salvando las distancias, en nuestra Orden estamos un poco como al principio de la democracia: a lo extranjero se le presupone una calidad de la que carece el producto nacional.
Y no digo que, en cuanto a tamaño y organización de las Obediencias no sea así, pero a título individual pues "cada uno es cada uno", y de todo hay en la viña del GADU.
De todos modos, la relación con los hermanos extranjeros acogidos por nuestros Talleres suele obedecer a unos patrones más o menos constantes, y hasta podríamos decir que el perfil de los miembros de allende nuestras fronteras permite clasificar su actitud en diversas categorías.
Un primer intento de clasificación nos mostraría a hermanos oriundos y ya iniciados en la, llamémosle así, "nación madre" de nuestra Obediencia (Reino Unido, Francia...). Mirados con una envidia sana y reverencial, como portadores de la luz primigenia, sus consejos son escuchados como los de un sabio y sus admoniciones son ley. Aunque tengan una cicatriz en la mejilla, un puño napolitano en el bolsillo y se beban el agua de los floreros. Sin embargo su actitud no suele ser prepotente, y las más de las veces son joviales y fraternos. Muchos son jubilados al sol de España que se nos quedan dormiditos en las Tenidas, sobre todo si antes se toman un par de copas.
Luego están los hermanos de centro y sudamérica.
Allí la masonería es profusa, exhuberante, amazónica y diversa. Aparece rimbombante, militar y llena de artesonados; o bien descamisada, indígena y descalza, pero feliz.
El hermano latinoamericano suele venir ya iniciado y revestido de Grados de varios Ritos, con imponentes ancestros de mandiles de oro viejo. Si hay varios hermanos de los Estados Unidos Mexicanos reina la confusión, ya que, invariablemente, sus Logias se llaman "Benito Juárez".
Luego están los hermanos holandeses y escandinavos, altos y de coloradas mejillas, que ni entienden ni hablan una palabra de español pero están siempre presentes en el Templo, cual esfinge, y en los ágapes, como certeros pinchadores de aceitunas y trozos de tortilla de patatas.
El problema del hermano extranjero, al igual que en el caso de los especímenes españoles, es si el hermano en cuestión es un jeta. El porcentaje de rostros acementados en los hermanos extranjeros es, aparentemente, inferior al registrado entre la cabaña nacional. Pero, tanto por nuestra actitud, como por los años de experiencia que nos llevan, cuando sale uno diestro en el manejo del sable, es decir: cuando sale sablista, resultan heridos todos los bolsillos, sacos, carteras, troncos y cuentas. La suerte es que la lidia, en estos casos, suele ser más tranquila y nos estoquean mejor que nuestros congéneres.
El momento Zen suele ser cuando el "hermano" en cuestión, tras deber mensualidades sin cuento, y haber pedido prestado hasta a la mujer de la limpieza, consigue que se le otorgue el monto completo del tronco, o fondo de solidaridad.
Profundamente conmovido, el jeta en cuestión abandona la Tenida, y nos deja con una cara como para fijarla con un spray. "Qué bonita es la solidaridad", murmura alguien.
El autor del post conoció a uno que incluso, después de hacer "bacarrá", nos invitó a las copas.
"Es lo menos que puedo hacer, después de lo bien que os habéis portado conmigo", dijo.